¿Cómo funciona CoolSculpting?

CoolSculpting funciona reduciendo la cantidad de exceso de tejido adiposo con el fin de modificar y mejorar el contorno del cuerpo; no está pensado como una solución para la pérdida de peso, sino como un procedimiento de escultura corporal.

Siempre habrá un cierto número de personas que hagan todo bien. Para la mayoría, esto significa una dieta saludable y ejercicio regular. Sin embargo, es muy común que las personas con este tipo de estilo de vida aún retengan depósitos de grasa que se niegan a desaparecer incluso a pesar de sus mejores esfuerzos. CoolSculpting es una alternativa segura y no invasiva a las intervenciones quirúrgicas como la liposucción para eliminar la grasa no deseada sin afectar negativamente a los tejidos circundantes. Además, la liposucción requiere el uso de una incisión para dejar espacio a la cánula para extraer la grasa. Esto ocasionalmente provoca cicatrices u otras complicaciones no deseadas, que se evitan con el uso de CoolSculpting.

La tecnología de CoolSculpting funciona mediante un método conocido como criólisis. Cuando los investigadores de la Universidad de Harvard descubrieron por primera vez que las células grasas podían ser atacadas y eliminadas con un frío extremo, se dieron cuenta de que esto podría tener aplicaciones para la escultura corporal. A temperaturas más bajas, las células grasas se descomponen de forma natural en el cuerpo, y estas temperaturas más bajas son la clave de la tecnología de CoolSculpting.

Además, es beneficioso el hecho de que las células grasas son más sensibles al frío que los tejidos circundantes, en las condiciones estrictamente controladas de CoolSculpting, de todos modos. Lo que significa que los investigadores pudieron congelar las células grasas y mantener los demás tejidos vivos e ilesos. Sólo las células grasas son expulsadas a través del sistema inmunológico.

Si decide disfrutar de esta alternativa no quirúrgica a la liposucción, el profesional médico con el que trabaje sólo podrá centrarse en las células grasas, sin afectar al tejido del cuerpo. CoolSculpting es un avance sobre lo que los otros métodos de reducción de grasa no pueden ofrecer: un contorno corporal efectivo sin necesidad de cirugía. Otras técnicas pueden utilizar ultrasonidos focalizados, calor intenso o inyecciones químicas. La mayor diferencia con Coolsculpting es que la piel, los músculos y los nervios permanecerán seguros durante el tratamiento. El resultado es una reducción permanente de las células grasas.

La duración de una sesión de CoolSculpting dependerá de cuántas zonas del cuerpo deban tratarse. Normalmente, una sesión puede durar tan sólo una hora. Además, los pacientes no tienen que hacer ningún tipo de preparación especial de antemano, a diferencia de las intervenciones quirúrgicas, que tienen muchos requisitos diferentes. Además, CoolSculpting no tiene prácticamente ningún tiempo de inactividad. La gran mayoría de los pacientes se sienten lo suficientemente cómodos después del procedimiento como para volver a sus actividades diarias inmediatamente.

¿Hay algún efecto negativo? Cualquier tratamiento cosmético puede dar lugar a complicaciones, sin embargo, CoolSculpting tiene un historial extraordinariamente fiable y está aprobado por la FDA. En algunos casos, los pacientes pueden sentir una leve molestia después del procedimiento, en particular una tirantez en la piel, pero normalmente no es suficiente para impedir que vuelvan al trabajo o que continúen con sus actividades diarias. En algunos casos, los pacientes pueden informar que experimentan molestias adicionales (aunque todavía leves) después de transcurrir una semana. Conocido como dolor de inicio tardío, normalmente sólo dura unos pocos días y se resuelve por sí solo.